1. Introducción
Vania en la calle 42 (Vanya on the 42 nd Street, Louis Malle, 1994) podría definirse como teatro dentro del cine, ya que es la representación de la obra de Chéjov, Tío Vania (Дядя Ваня, Antón Chéjov 1899), llevada a cabo como si de un ensayo teatral se tratara. A través de un arranque a modo de documental, su director, Louis Malle, presenta ante el espectador lo que será la propia representación. Se trabaja desde el lenguaje cinematográfico con giros de cámara y con actores que representan a sus personajes atendiendo a esa técnica. Antes de explicar en qué va a consistir este estudio y los objetivos que nos planteamos, hablaremos de la obra en sí y de cómo surge la idea de filmar Vania en la calle 42 (1994) con el fin de ofrecer una contextualización.
André Gregory, director teatral de Tío Vania en la película de Malle, en un momento de crisis de financiación y de asistencia de público, decide arriesgarse a una representación alternativa en un teatro abandona- do del barrio de New Amsterdam para un grupo reducido de espectadores.
El viejo teatro ya había sido testigo de la peculiar experiencia teatral impulsada por el vanguardista director André Gregory: ante la imposibilidad de usar el escenario sobre el que se había caído parte del techo, la obra se representaba en distintas partes del teatro, a las que los miembros del público eran guiados entre acto y acto. (Ayala, 1996, p. 135).
Esta crisis estaba fomentada en parte por las ideas y el tono crítico con el que trataba el sueño americano muy acorde con las ideas de Mamet, guionista de Vania en la calle 42 (1994). En cualquier caso, Gregory, con el fin de evitar la desmotivación del elenco, no quiso paralizar los ensayos de la obra. De esta manera su proyecto fue ganando popularidad al irse añadiendo un público de la categoría de Robert Altman y Woody Allen, entre otros.
Se invitaba a asistir a una representación insólita: dos horas de teatro «vivo», sin vestuario, ni artificios, con muchos descansos y piscolabis entre actos, el escaso público (entre otros, nombres como los de Susan Sontag, Robert Altman, Richard Avedon o Woody Allen fueron espectadores de excepción) compartía las entrañas de una producción teatral rodeada de actuaciones soberbias y una atmósfera mágica. (García Cívico, 2018, p. 18).
Sin vestuario, sin publicidad y sin atrezzo, pero con unos actores con recorrido, creó este espectáculo diferente y dirigido a amantes del teatro, incluso introduciendo cambios en la obra de Chéjov hasta que logró crear una atmósfera cuidada pero original. “La desnuda escenografía y puesta en escena ele Vania en la calle 42 consigue aunar teatro y cine en una experiencia única recurriendo a la fuerza de un texto y al rostro de los actores” (Balagué, 1996, p. 27).
Louis Malle, amigo de Gregory, quedó maravillado con el proyecto por lo que decidió embarcarse en la grabación de Vania en la calle 42 (1994). Sin apenas recursos, y volviendo a los orígenes de la Nouvelle Vague, haría su homenaje al teatro de una forma totalmente casual pero no por ello menos arriesgada. “Vania en la calle 42 se perfila, en cambio, como uno de los films más sólidos de los noventa, una década donde la navegación a contracorriente resulta mucho más ardua que en la de los sesenta”. (Riambau, 1996, p. 21).
El propósito de nuestro estudio es analizar la construcción de los personajes de la obra por parte de los actores y observar qué partes del sistema Stanislavski se cumplen, dada su vinculación con el teatro de Chéjov. Su sistema entra en EEUU a través del Teatro del Arte de Moscú, que posteriormente evolucionará al Método; de este encuentro se producen grandes similitudes e importantes aproximaciones entre ambas técnicas. Para observar analogías y diferencias entre trabajar la obra para el teatro o para la cámara hemos recurrido al estudio de sus autores (director y guionista), a la narrativa de la película y al análisis de la interpretación de los protagonistas conforme a los principales puntos del sistema Stanislavski, a los cuales haremos referencia mediante la observación de sus respectivos trabajos ante la cámara.